viernes, 9 de octubre de 2009

LA CHALLENGE EN IMÁGENES


Día 4 de octubre, las 7:00 horas, son los momentos previos, fresquete, y con los nervios a flor de piel:


Preparando el operativo para la natación, ya amanece (que no es poco)... pero aún más nervioso:



Ahora ya no hay vuelta atrás, pero... ¿Puedo hacerlo en globo?

Vale, me dicen que no, son las 8:40, cajón Nº 10, salida, a nadar :


Anda, pero si ya he terminado, sin agobios ni ataques de pánico. El estado del mar perfecto, como un plato, un poco fría. El único inconveniente, que nado unos metros de más, porque las referencias en el primer tramo estaban complicadas y me desviaba.

La transición más lenta de la historia IRONMAN, unos 16 minutos para cambiarme. La verdad es que a mí no me pareció tanto, pero también es verdad que tenía que encontrar el mono que me pegaba con el casco, además, no daba con el maquillaje ni la sombra de ojos apropiados.


El circuito ciclista no era llano, pero sí bastante rápido. Además no hizo viento. Aquí en plena acción ciclista, acoplado y con cara de velocidad (no fue para tanto, una media de 32 Km/h):




















Otra transición, esta más rápida (me lío la manta a la cabeza y no me pongo ni rimel), y a correr:


Ya queda poco, estoy en la alfombra y el público me anima dándome alas ...


Por fin, todo termina, y parece que cuando más sufres, mejor te sientes (quizás eso sea lo que nos engancha).

En resumen, objetivo y pronósticos cumplidos. Un magnífico fin de semana y ahora a descansar y planificar la temporada que viene (me quedo sin Lanzarote, se han agotado las inscripciones). Tengo que decidirme pronto, pero seguramente, y por calendario me decante por Alemania o Suiza.

No os quejareis los críticos a mi narrativa, que esta vez no he podido ser más escueto.

Ciao.