lunes, 2 de noviembre de 2009

LOS DIAS PASAN... EL VERANO NO.


Menudo tiempo el que estamos teniendo, los lagartos como yo estamos encantados, que siga, que siga... Pero cómo lo siento por los que repudian el calor, por los que añoran el frío, y por los amantes de la nieve y los deportes blancos.

Si no cambian las cosas (más bien si no las cambiamos), la tendencia está muy clara, en nada vamos a tener que ir todo el año con la protección solar a cuestas. Y ya digo, por mi parte, que se quede como está, que mis parámetros de temperatura (sin exagerar) son los siguientes:

- Hasta 10 º = Un frío de cojones.
- Entre 10º y 20 º= Frío.
- Entre 20º y 30º= La temperatura ideal.
- Entre 30º y 40 º= Un calorcito bueno.
- A partir de 40º= Me voy a la playa.

Los únicos inconvenientes de estas temperatura, en esta época del año, son los escaparates de las tiendas de moda, que exhiben desde hace semanas la ropa de temporada y nos causan calentura solo verlos. Además, ponen los aires acondicionados a menos 0º para motivar al consumidor, sin éxito, para que compre bufandas. Los mosquitos, que siguen dando guerra y forman hordas organizadas para realizar ataques desprevenidos, y los virus, que parece que encuentran el mejor caldo de cultivo para propagarse y contagiarnos a "tutiplen". Soluciones: no mirar los escaparates, un bote de aután siempre a mano y una vacuna de amplio espectro viral o en su defecto bocata de frenadol (además de la referida e imprescindible protección solar), y asi disfrutar del veranillo permanente que nos queda. ¡¡ VIVA EL CAMBIO CLIMÁTICO, MUERTE AL INVIERNO!! Y es que no se puede ser tan conservador como para pretender que las distintas estaciones del año respeten su tradición y que se cumplan los teóricos pronósticos de temperaturas. CARCAS, MAS QUE CARCAS!! A ver si no vamos a saber respetar la LIBERTAD CLIMÁTICA. Que haga el tiempo que quiera, y si de vez en cuando tiene que caer algún diluvio, pues no pasa nada. Lo contrario seria imponer el clima por la fuerza, y eso nunca. Ante todo talante. Todo lo más negociar, pero no sé con quién... ¿Será con San Pedro? ¿Tendrá interlocutores? ¿Los conocerá Zapatero?

Además, dejando el bochorno permanente paliaremos la crisis: gastaremos menos al no tener que comprar prendas de abrigo, también seremos ecológicos y no mataremos animalicos para despellejarlos, tendremos menos consumo de plásticos porque no necesitaremos bolsas para guardar la ropa que no es de temporada, lanzaremos menos emisiones de CO2 al no hacer uso de la calefacción, y además, en nuestra querida región fomentaremos los ingresos por la vía del turismo, ya que se podrá coger bronce y hacer playng durante todo el año. Con un poco de vista, unas cuantas clínicas para tratar el cáncer de piel, y el negocio redondo. Alcanzaremos el pleno empleo, los que no se mueran estarán trabajando. No se puede pedir más.

Pero según las noticias, los chinos, que nunca se han caracterizado por su compromiso con las libertades, se han dedicado este fin de semana a bombardear el firmamento con nitrógeno líquido, y yoduro de plata, para provocar lluvias y luchar contra la sequía. Son unos auténticos belicistas, unos asesinos de nubes. Al parecer, han conseguido una copiosa nevada a cañonazos. Cuando les vengan las inundaciones se van a enterar. Ahora, después de cargarnos la capa de ozono, y de provocar el calentamiento global del planeta, pretendemos que llueva a la carta, lo justico, ni una gota más, ni una gota menos, y todo a golpe de varita. Lo único que se me ocurre, después de estas reflexiones, y seguro que lo dijo antes algún filósofo-pensador, es que EL SER HUMANO ES... GILIPOLLAS POR NATURALEZA.

Ciao,


Carlos