Este domingo hemos podido disfrutar en la Media Maratón de San Javier, cuya 4ª edición ha registrado su record de participación, con más de 1.000 deportistas, y una buena organización, casi sobrepasada por la gran aceptación, además de una magnífica bolsa para el corredor.
Como siempre me había coincidido con otros eventos deportivos, generalmene los duatlones cros, todavía no había tenido la oportunidad de correr esta prueba, pero este año ya estaba mentalizado y renunciando al duatlón de Puerto Lumbreras, me presenté allí para ver lo que me deparaba la mañana, además del viento pronosticado por los meteorólogos.
Al final, todo estupendo, con los ánimos e infraestructura del amigo Miguel (Canario), que vive muy cerca del Pabellón, y que este año se quedaba sin participar por un problema en el pié, además de las labores propias de la crianza, que también lo distraen bastante de los entrenos, me puse en la línea de salida, yo solo, sin ninguna ambición, tan solo la de disfrutar y terminar, evitando en lo posible los calentones y así iniciar la temporada de medias con cierto relax, porque quedan muchas pruebas por delante, y pretendo ir de menos a más, y así llegar a punto a la Maratón de Valencia, el próximo 10 de febrero.
Objetivo cumplido, desde el primer Km. inicio conversación con otro participante, también triatleta, que me pregunta por la Challenge de Barcelona (mi participación la delataba la gorra que llevaba), y desde ese instante, hasta casi la meta, fuimos charlando y compartiendo experiencias. Un saludo muy entrañable para este nuevo amigo, Agustín, un joven médico (otro más) del ejercito que actualmente reside en Cuenca, y que había venido con su familia a San Javier para participar en el evento. Gracias a él, puedo afirmar que la de San Javier ha sido la media más corta de mi vida deportiva, y no porque esta tuviera menos metros (al contrario mi GPS marcó 21.400), sino porque su compañía y amena conversación hicieron que los Kms. pasaran, sin sentir, y cuando me vine a dar cuenta estaba dando la vuelta a la pista de atletismo, terminando los últimos metros.
Esta foto me la ha mandado él mismo (el de azul en segundo plano). Gracias Agustín.
Al final, un optimista 1:37:38, que me deja un excelente sabor de boca, pensando en los próximos compromisos y objetivos. Los siguientes serán, por este orden, el duatlón de Jumilla el día 22 de noviembre, y la media de Cieza el 6 de diciembre.
También os dejo una del pasado Duatlón de Cieza.
Ciao
Carlos
Como siempre me había coincidido con otros eventos deportivos, generalmene los duatlones cros, todavía no había tenido la oportunidad de correr esta prueba, pero este año ya estaba mentalizado y renunciando al duatlón de Puerto Lumbreras, me presenté allí para ver lo que me deparaba la mañana, además del viento pronosticado por los meteorólogos.
Al final, todo estupendo, con los ánimos e infraestructura del amigo Miguel (Canario), que vive muy cerca del Pabellón, y que este año se quedaba sin participar por un problema en el pié, además de las labores propias de la crianza, que también lo distraen bastante de los entrenos, me puse en la línea de salida, yo solo, sin ninguna ambición, tan solo la de disfrutar y terminar, evitando en lo posible los calentones y así iniciar la temporada de medias con cierto relax, porque quedan muchas pruebas por delante, y pretendo ir de menos a más, y así llegar a punto a la Maratón de Valencia, el próximo 10 de febrero.
Objetivo cumplido, desde el primer Km. inicio conversación con otro participante, también triatleta, que me pregunta por la Challenge de Barcelona (mi participación la delataba la gorra que llevaba), y desde ese instante, hasta casi la meta, fuimos charlando y compartiendo experiencias. Un saludo muy entrañable para este nuevo amigo, Agustín, un joven médico (otro más) del ejercito que actualmente reside en Cuenca, y que había venido con su familia a San Javier para participar en el evento. Gracias a él, puedo afirmar que la de San Javier ha sido la media más corta de mi vida deportiva, y no porque esta tuviera menos metros (al contrario mi GPS marcó 21.400), sino porque su compañía y amena conversación hicieron que los Kms. pasaran, sin sentir, y cuando me vine a dar cuenta estaba dando la vuelta a la pista de atletismo, terminando los últimos metros.
Esta foto me la ha mandado él mismo (el de azul en segundo plano). Gracias Agustín.
Al final, un optimista 1:37:38, que me deja un excelente sabor de boca, pensando en los próximos compromisos y objetivos. Los siguientes serán, por este orden, el duatlón de Jumilla el día 22 de noviembre, y la media de Cieza el 6 de diciembre.
También os dejo una del pasado Duatlón de Cieza.
Ciao
Carlos