Pues sí, después del empacho de LAS FORTALEZAS, tocaba, primero, recuperar las piernas un tanto maltrechas por el esfuerzo, y luego, retomar la competición porque el sábado por la tarde tocaba el Duatlón de Cehegín, con el que se ponía fin al circuito de Duatlones de la Federación Murciana, última prueba puntuable de la Liga Regional. Esta me hizo imposible estar con los amigos de LA MOTA en la etapa de preparación de los 101 Ronda, que tenían programada en Sierra Espuña para el mismo sábado, una clásica que siempre se nos va de las manos, sobre todo por la dura subida al Pedro López desde Malvariche, y que este año se hizo todavía más pegajosa por el calor que hubo.
La semana transcurrió así: el lunes descanso total y masaje, el martes salida en bici de carretera acompañado por Javi, con regreso desde Alhama metido en la grupeta de Valverde, el miércoles MTB por la Mota, el jueves una hora de running suave, y el viernes 45 minutos de trote progresivo, de menos a más. Nada de natación porque las heridas producidas en la caída en Jumilla no estaban del todo curadas.
Con esos días y pautas de recuperación activa, el sábado a Cehegín, con los amigos del PEKABO Javi, Mayte y Pedro Vizcaíno. El Duatlón resultó como esperábamos, bastante duro por los perfiles con cuestas, rompepiernas, pero no son precisamente mi punto débil, y aunque prefiero los más duros con subidas largas, no me fue del todo mal. Un séptimo puesto en la categoría, que me coloca definitivamente en el sexto puesto de la Liga Regional en la categoría V1. Mejor de lo que esperaba. Las fotos son de esta última carrera, con el mono de LA MOTA, porque la equipación del Mandarache sigue siniestrada y sin recambio.
Así las cosas, y como estaba previsto, el domingo a la carrera Orihuela Costa, donde nos dimos cita unos 500 corredores para hacer el 8.000 organizado por el Club TRAGAMILLAS. Aunque en principio mi idea era no forzar, y acompañar a Feli y a Riqui (en la foto, junto con otros de los mandaraches participantes), saliendo desde los puestos de cola, y a ritmo tranquilo, al final me calenté y en el km 1 me dejé llevar por el "dimonio" que llevo dentro, terminando el 73º de la general, 9º de mi categoría. Bueno, es lo que tiene estar calentito (por el calor que hizo, y por la carrera del día anterior). Definitivamente me he encontrado mejor de lo que esperaba, completamente recuperado en una semana, y dispuesto, con todas las ganas del mundo, para afrontar el Maratón de Madrid (MAPOMA), el domingo próximo. No tengo objetivos, aunque me encuentro en buena forma, todos sabemos que el perfil de Madrid es bastante más duro que el de Berlín, donde tengo mi MMP. Serán las sensaciones a lo largo de la carrera las que manden y me digan hasta donde puedo llegar. Ya os cuento...
Ciao.
