Ya estamos terminando el mes, y seguimos poco a poco, cogiendo ritmo para las pruebas que se nos avecinan, y compruebo, calendario en mano, que se me acumula el trabajo.
Sin ir más lejos, el día 2 de abril repetiré en la Ruta de las Fortalezas, esperando terminar el recorrido de este año, más duro y largo que el anterior, en torno a las 5:00 - 5:15 horas. A mediados del mismo mes, a correr el Maratón de Madrid, enseguida, a primeros de mayo se nos viene encima Ronda, con sus 101 duatlón, en junio, el Maratón del sol de media noche en Tromso (Noruega), y el remate final en julio, con el IRONMAN de Bolton. Por medio, los duatlones de la federación, La Inmortal de Caudete, las medias maratones de Torrevieja, Cartagena, Almansa...
En fin, me he cansado solo de contarlo. Pero bueno, con calma y poco a poco, lo importante es forzar lo justo, para evitar lesiones, y con ese ánimo hemos empezado el año. Pronto las primeras salidas largas en bici, para recuperar el fondo, y algo de carrera a pié por monte para llegar preparado a las Fortalezas. Por cierto, dado el éxito de esta edición, agotados los dorsales en una semana, está claro que en las próximas nos tocará estar al pié del ordenador para conseguir la inscripción (como ocurre para Ronda).
En esta línea, el martes pasado, con Ino, a Guardamar, donde hicimos estas foticos. Para ir adaptando la postura, me llevé la cabra, y así terminó mi cuello...
El jueves, con Félix, el Sr. Google, a confirmar la ruta de Carrascoy por camino de tierra. Lo logró, localizó la pista y pudimos hacer el recorrido los dos, a modo de avanzadilla.
El sábado, a romper charcos helados por el Coto y regreso por la llamada "Rambla del tío Charly". Fresquete pero divertido.
Y el domingo, con Riqui, a la Media Maratón de Santa Pola, donde sin forzar nada, un tiempo razonable de 1:46, teniendo en cuenta la salida masiva y lo difícil que resulta mantener un buen ritmo entre tantos corredores (casi 8.000).
Y el domingo, con Riqui, a la Media Maratón de Santa Pola, donde sin forzar nada, un tiempo razonable de 1:46, teniendo en cuenta la salida masiva y lo difícil que resulta mantener un buen ritmo entre tantos corredores (casi 8.000).
Salvo la incidencia de las camisetas (solo daban tallas XL), la organización de Santa Pola perfecta, como siempre, y el ambiente extraordinario, a pesar del frío. Aunque el crono pone 1:49, dejamos claro que ese es el tiempo oficial, desde el pistoletazo, el tiempo real, es decir desde que llegamos al punto de salida hasta la meta, es el que digo antes.
Ciao
Ciao
