Tal cual, así me hallo, eligiendo y comprobando el material, tomando decisiones de última hora (probablemente equivocadas), y pasando los nervios de los últimos días.
Para empezar, he decidido, después de analizar el perfil y ver los comentarios en facebook sobre el segmento, que no me acompañará la cabra, sino flaquilla, con los acoples, y las ruedas Zipp de perfil (303 delante y 404 atrás). Definitivamente creo que el mayor peso y la postura de la cabra pueden ser un inconveniente más que una ventaja frente a su indiscutible aerodinámica, pero cuando unos 40 kms del recorrido son hacia arriba, algunos de ellos duros, y todavía te quedan otros 140, la ligereza y la comodidad que me aporta la flaqui, una vez puestas en la balanza todos los pros y los contras, me llevan a esta elección de última hora. Me la juego a que luego me arrepiento, y que en Regensburg seré yo el único que no lleva bici TT. Pues bueno, qué se le va a hacer, uno es como es, y a estas alturas está complicado que vaya a cambiar, a salvo transplante de "serebro".
Por otro lado, la temperatura del lago donde tendrá lugar la natación está, durante estos días, en el límite del uso del neopreno, por lo que tampoco se sabe a estas alturas si se podrá usar o no. Hasta el mismo día de la prueba, probablemente, la organización no tomará una decisión , por lo que otro añadido más de incertidumbre.
Menos mal que tengo claro las zapatillas que usaré para correr, porque si no, esto iba a parecer una pelicula de suspense...
En fin, que ya está todo hecho (coño, se me olvida que todavía me queda meter la bici en la maleta), y el viernes en avión hacia Munich, y desde allí coche de alquiler hasta Ratisbona. Esta vez, y para eludir problemas con el vuelo me llevo una estampita y me encomiendo a San Pepito Blanco.
Mi próxima entrada espero que sea para contaros una nueva batallita IR con mi medalla finisher al cuello.
Ciao.
Para empezar, he decidido, después de analizar el perfil y ver los comentarios en facebook sobre el segmento, que no me acompañará la cabra, sino flaquilla, con los acoples, y las ruedas Zipp de perfil (303 delante y 404 atrás). Definitivamente creo que el mayor peso y la postura de la cabra pueden ser un inconveniente más que una ventaja frente a su indiscutible aerodinámica, pero cuando unos 40 kms del recorrido son hacia arriba, algunos de ellos duros, y todavía te quedan otros 140, la ligereza y la comodidad que me aporta la flaqui, una vez puestas en la balanza todos los pros y los contras, me llevan a esta elección de última hora. Me la juego a que luego me arrepiento, y que en Regensburg seré yo el único que no lleva bici TT. Pues bueno, qué se le va a hacer, uno es como es, y a estas alturas está complicado que vaya a cambiar, a salvo transplante de "serebro".
Por otro lado, la temperatura del lago donde tendrá lugar la natación está, durante estos días, en el límite del uso del neopreno, por lo que tampoco se sabe a estas alturas si se podrá usar o no. Hasta el mismo día de la prueba, probablemente, la organización no tomará una decisión , por lo que otro añadido más de incertidumbre.
Menos mal que tengo claro las zapatillas que usaré para correr, porque si no, esto iba a parecer una pelicula de suspense...
En fin, que ya está todo hecho (coño, se me olvida que todavía me queda meter la bici en la maleta), y el viernes en avión hacia Munich, y desde allí coche de alquiler hasta Ratisbona. Esta vez, y para eludir problemas con el vuelo me llevo una estampita y me encomiendo a San Pepito Blanco.
Mi próxima entrada espero que sea para contaros una nueva batallita IR con mi medalla finisher al cuello.
Ciao.